La D.G.T. ha lanzado una campaña de vigilancia en la
que los vehículos de transporte escolar serán vigilados de una manera más
exhaustiva: se comprobarán el uso de los cinturones de seguridad,
autorizaciones y documentación del vehículo y del conductor, velocidad, tiempos
de descanso, test de alcohol y drogas, etc. Y es que el autobús es el medio de
transporte diario para unos 230.000 alumnos. A pesar de ser un medio de
transporte muy seguro en 2015, 27 autobuses escolares se vieron implicados en
accidentes de tráfico en los que 9 ocupantes resultaron heridos.
Gregorio Serrano, director general de tráfico
señala que “Debido a la vulnerabilidad de sus pasajeros y a las vías por las
que se suele circular, en su mayoría carreteras convencionales, necesita de una
especial vigilancia (…)”.
Por ello, desde el 27 de noviembre y hasta el viernes 2 de Diciembre, los agentes de Tráfico de la
Guardia Civil, llevaran a cabo un dispositivo especial de vigilancia del transporte escolar. A parte
de las condiciones técnicas y de los elementos de seguridad del vehículo, se
controlará que los conductores circulen a la velocidad permitida y no hagan uso
de su teléfono móvil u otros aparatos que supongan distracción.
Tras ser identificados la semana pasada dos
conductores que transportaban niños a un centro escolar bajo los efectos del
alcohol, la guardia civil también realizará controles de alcohol y drogas. Los
conductores profesionales tienen limitada la tasa de alcohol a 0.15 mg/ litro y
estos dos conductores doblaban y quintuplicaban esta tasa de alcoholemia.